Esta perra no logra asimilar la muerte de su mejor amiga

Pebbles perdió a su mejor amiga a causa del cáncer, ella no logra entender porqué nunca volvió a casa. Afortunadamente su familia entiende su dolor y la acompaña.

Pebbles fue adoptada por su familia cuando era apenas una pequeña cachorra, gracias a esto logró conocer a su hermana Ruby con la que pasó muchos momentos extraordinarios, pero quien por desgracia falleció cuando tenía tan solo 4 años de edad y desde entonces, esta perra no logra aceptar la idea de que su mejor amiga no volverá.

En un inicio Ruby cumplió el papel de madre para Pebbles brindándole toda su atención y desde ese momento surgió un lazo afectivo muy fuerte entre ambas.

Rob Gower dijo:

“Su juego favorito era cuando estaban juntas, tratando de mantener su boca abierta sobre la nariz de la otra”.

Pebbles estuvo prácticamente toda su vida al lado de su hermana, ellas eran inseparables hasta que Ruby fue diagnosticada con cáncer y falleció.

Desde que Ruby se fue de casa, esta perra no logra aceptar su partida. Pebbles ha demostrado estar sumamente confundida.

“Regularmente Pebbles se la pasa en una habitación o pasillo mirando alrededor. Cada una de ellas tenía una cama en la sala de estar, pero optaron por compartir la misma cama. Sin embargo, desde que sucedió lo de Ruby, Pebbles se niega a poner una sola pata en la cama que compartían y en su lugar duerme en la que usaba anteriormente”.

Esta perra no logra aceptar que su mejor amiga ha muerto

La muerte de Ruby causó un gran dolor a toda la familia y cuando sus cenizas fueron entregadas, Gower recibió un fuerte golpe de emociones.

“Puse a Ruby en una mesa con su collar y una nueva pelota de tenis”.

Pebbles hizo algo realmente increíble cuando Gower se sentó junto a las cenizas de Ruby. Ella  se acercó, tomó la pelota que había puesto sobre la mesa y comenzó a jugar con ella, luego regresó y dejó caer la pelota al lado de las cenizas de Ruby y se acostó. Pebbles solo deseaba jugar de nuevo con su mejor amiga.

“Una vez que Pebbles se dio cuenta de que Ruby no podía jugar más con ella, dio vueltas, se acostó en la alfombra junto a su vieja amiga y soltó un fuerte suspiro”.

“La intuición e inteligencia de Pebbles me hicieron recordar que ella es otro miembro de mi familia”