El oficial Russ “Wolf” Harper, cofundador de Justice Rescue, dijo a The Dodo:
“Ella no se alejaría de su lado. Cada vez que alguien trataba de acercarse, su amiga trató de cubrir a la otra… Era como si ella fuera a recibir la paliza por la otra”.
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Pitbull abandonada usada para peleas protege a su amiga a toda costa
El oficial Harper es alto y tiene tatuajes en sus brazos, tiene barba y su cabeza rapada, pero tiene una capacidad especial para calmar a los perros con lo que él llama su “voz de una chica de 10 años”. Y eso es lo primero que intentó cuando vio a estos perros al llegar al parque.
Harper dijo:
“Me puse de rodillas y los llamé con mi voz de una chica de 10 años. Layla se acercó a mí con su cola meneando pero sus ojos apretados, como si ella pensara que podría ser golpeada”.
Ella finalmente se acercó a Harper y aceptó algunas caricias en su nariz y frente. Y luego corrió de regreso donde su amiga.
Pero finalmente Harper consiguió acercarse lo suficiente a ambas para poner su chaleco pesado de policía sobre ellas para mantenerlas caliente. Luego las levantó y las llevó al veterinario, donde se preparó para lo peor.
Gracie estaba tan fría y débil, que apenas podía abrir los ojos, y Harper pensó que tendría que ser sacrificada. Ambas estaban demacradas y cubiertas de heridas y cicatrices. Era obvio para el oficial que estas pobres perritas habían sido utilizadas como perros de pelea casi toda su vida.
Harper dijo:
“Ambas tenían heridas frescas de mordedura… Con sólo dos años de edad, y sólo han conocido el abuso, sólo han conocido la lucha”.
“Gracie se estaba muriendo. El veterinario le dio fluidos y comenzó a calentarla”.
Pitbulls eran usadas para peleas de perros
Harper se ha dedicado a rescatar perros durante años, incluso recibió entrenamiento como oficial de policía para que pudiera ser el primero en llegar a la escena cuando la policía recibe informes de casos como éste.
La policía generalmente no está específicamente capacitada para lidiar con la crueldad animal. Harper y su cofundador Crash iniciaron Justice Rescue con el objetivo de llenar este vacío. Ellos se entrenaron en la aplicación de la ley y ahora están certificados como investigadores de la escena del crimen para ayudar a encontrar abusadores y proveer evidencias a los fiscales de distrito.
Debido a esto, Harper ha podido ayudar a acabar con los rings de peleas de perros, en lugar de esperar a que las víctimas caninas salgan a la superficie primero.
Increíblemente, Gracie empezó a hacerse más fuerte. Cuando Harper entró en su habitación en el veterinario para una visita, se transformó inmediatamente.
Harper dijo:
“Gracie me vio y de hecho se levantó. Ella empezó a comer de mi mano, se acordó de mí… Ella quería seguirme alrededor. Me senté y se sentó en mi regazo”.
Pero al día siguiente Layla decayó y necesitó cuidados especiales. Ella finalmente se recuperó de nuevo, pero ambos perros están todavía en condición delicada. Están tan sorprendidas que han sido rescatadas, observó Harper:
“Están amando el afecto, no saben qué hacer con él”.
Gracie y Layla esperan recuperarse y encontrar un hogar
Gracie y Layla estarán en el veterinario por cerca de una semana. Después de eso irán con Harper que les ayudará a rehabilitarse, conseguirles un entrenamiento básico y ayudarles a aprender a confiar de nuevo. En última instancia serán adoptadas por la familia correcta, cuando estén listas.
“En muchos casos, los perros se unen tan estrechamente porque no tienen a nadie más. Ahora que tienen tanta gente ayudándoles a mejorar, apenas pueden creerlo. Sólo te miran, como si dijeran: ‘¿Esto es real?'”.
Usted puede ayudar a combatir el abuso animal donando a Justice Rescue aquí. Si tiene alguna información sobre el caso de Gracie y Layla que pueda ayudar con la investigación, puede comunicarse con Justice Rescue al 215-942-6363 o con Justice Rescue
Más información: Justice Rescue
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