Este joven que no tiene un hogar ni recursos económicos, cobija a su amigo peludo
para evitar que el frio pueda dañar su salud. Con estos actos nos demuestra a
muchas personas que no se necesita tener mucho para tener un gran corazón no egoísta
y NO abandonar a un amigo que nos da
lo mejor de el en todo momento y situación de nuestra vida.
Mientras que muchos de nosotros nos quejamos,
por todo y por nada, que ya no tengo espacio, que no tengo para las benditas
croquetas y miles de pretextos absurdos para deshacerte de nuestros amigos perrunos
o gatunos olvidando por completo la
responsabilidad que asumimos al tenerlo o adoptarlo. Con esos actos enseñamos
mal a nuestros hijo, sobrinos, hermanos o personas que están a nuestro
alrededor.
RECUERDA:
¡Abandonar es Matar, no Abandones!!!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Ingrese su comentario.